Global Exchange desembarca en Brasil con la apertura de siete oficinas en dos aeropuertos

Global Exchange
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Actualizado: jueves, 11 diciembre 2014 15:28

MADRID, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -

Global Exchange ha desembarcado en Brasil con la apertura de siete nuevas oficinas en los aeropuertos internacionales de Natal y Brasilia, de las que seis ya están operativas, y una inversión inicial de dos millones de euros, según anunció la compañía.

Se trata del primer paso de la compañía para su expansión en este mercado, la gran apuesta del grupo salmantino para los próximos dos años.

Global Exchange ofrece ya sus servicios de cambio de moneda en dos oficinas en el Aeropuerto Internacional Augusto Severo de Natal y otras cuatro en el Aeropuerto Internacional Juscelino Kubitschek de Brasilia, a las que se sumará una quinta oficina en las próximas semanas.

En estas nuevas oficinas, los pasajeros pueden cambiar hasta 25 monedas extranjeras diferentes, atendidas por una plantilla de 60 empleados, para un volumen de tráfico que suma los 19 millones de pasajeros en ambos aeropuertos.

Global Exchange obtuvo en abril la licencia para operar en cualquier parte del mercado brasileño, después de tres años de intensas gestiones, por lo que la inversión inicial de dos millones de euros podría ampliarse con la apertura de nuevas oficinas en otros puntos del país.

El presidente de Global Exchange, Isidoro Alanís, ha explicado que Brasil ofrece "una gran oportunidad de negocio para la compañía, que entra en el país con la vista puesta en los Juegos Olímpicos 2016".

"Nos guiamos por el afán de buscar constantemente fórmulas para crecer y expandirnos", ha señalado Alanís, quién ha subrayado que la obtención de licencia en este mercado es un "trámite extremadamente difícil que se ha prolongado durante más de tres años".

Global Exchange, con sede en Salamanca, ya está presente en 10 países de Latinoamérica, a los que ahora se une Brasil, región a la que dio el saldo en el año 2001. En España cuenta con 27 oficinas, a través de las cuales controla el 62% del tráfico anual de pasajeros en aeropuertos españoles.