Óscar, el inquilino que iba a ser desalojado, ha reconocido estar "muy nervioso" con lo sucedido, pero a la vez "aliviado" por no haberse producido el desahucio. "No es que me quede sin el piso, es que tengo ahí metida mi vida. De momento, el mayor alivio, porque en un momento dado dormir en el coche algo que se puede hacer, pero dejar todos mis enseres en una casa es algo que me tenía abrumado", ha añadido.